Este viernes fue inaugurado el primer espacio de cultivos de cannabis de la UNICEN, que se encuentra ubicado en el Campus Universitario de Olavarría. La iniciativa surge de un trabajo en conjunto por parte de la Facultad de Ciencias Sociales, la Facultad de Ingeniería, la Clínica María Auxiliadora y Cannabis Activa.
En el acto estuvieron presentes los referentes del proyecto “Universidad y Cannabis”, el Dr. Gastón Barreto (FIO-UNICEN), el Dr. Marcelo Sarlingo (FACSO-UNICEN), Emilio Hurtado por Cannabis Activa y el Dr. Enrique Bintana (Clínica María Auxiliadora), quienes realizaron el corte de cintas y posteriormente realizaron una recorrida por el interior de las instalaciones. Participaron además la decana de la Facultad de Ciencias Sociales, Lic. Gabriela Gamberini; el Secretario de Extensión, Bienestar y Transferencia de la FACSO, Lic. Nicolás Casado.
En el concurrido acto participaron también concejales del Honorable Concejo Deliberante, donde funciona la Mesa Local por el cannabis medicinal, que integran también investigadores de la FACSO.
El proyecto “Cannabis Sativa L: obtención y caracterización de derivados para uso terapéutico generados a partir de la construcción cultural de saberes populares” fue aprobado por la Secretaría de Ciencia y Tecnología de la UNICEN.
La decana de la Facultad de Ingeniería, Ing. María Peralta, estacó el trabajo en conjunto logrado entre las distintas entidades y manifestó que “esto demuestra que este es un servicio que la Universidad tiene que brindar, para eso está la universidad, para atender y para mejorar calidad de vida de la gente”.
Por su parte, el Dr. Barreto dio cuenta de cómo se gestó el proyecto y cómo se acercó al estudio del cannabis. “En 2016 había una necesidad de de poner sobre la mesa la discusión necesaria entre todas las instituciones públicas y privadas para hablar de algo que ya veníamos viendo hacia tiempo en la sociedad y en el mundo”, manifestó.
Barreto agregó que “lo simbólico de este espacio son las instituciones que enmarcan este proyecto. Viene a plantar una lógica de construcción dinámica, interdisciplinaria, que necesita de muchos actores que puedan pesar a esto como una clave productiva que se dé de acá en más”.
“La ciudad tiene cuestiones técnicas, un laboratorio de producción de medicamentos, apoyo político y profesionales de la salud investigadores” que se convierten en las condiciones necesarias para avanzar hacia la producción y acceso al cannabis medicinal, planteó.